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Incentivando la lectura

26 de August 2020

Hace unas semanas los invitamos a volver a leer y disfrutar de la lectura, ahora que estamos en casa y podemos ser modelos para nuestros hijos, incentivando en ellos el volver a desarrollar el interés por hacerlo. Pero sería bueno recordar que estrategias nos ayudan a sacar el máximo de provecho a esta fuente rica de información y conocimientos como es un libro.

Antes de leer:

  • Pon atención al título y piensa”¦. ¿Qué me sugiere?
  • Relaciónalo con algún contenido que conozcas
  • ¿Qué conozco del tema? O puedes verlo como la posibilidad de aprender o disfrutar de algo nuevo.
  • Ojea el texto, lee el índice y el título, a través de ellos puedes sacar nociones de que se tratará.
  • Piensa en el propósito de tu lectura
  • ¿Para qué leeré este libro?
  • Formula una hipótesis sobre el texto, trata de imaginar y analizar de que se puede tratar

Durante la lectura:

  • Subraya lo que sientas es importante.
  • Aclara las dudas que te surjan, anótala si es necesario para que no la olvides
  • Formula preguntas sobre lo leído
  • Relee aquello que no entiendes
  • Busca en el diccionario o internet el vocabulario que no conozcas inmediatamente o anótalo para buscarlo al terminar de leer
  • Relaciona la información del texto con tus conocimientos.

Después de leer:

  • Realiza un resumen, mapa conceptual, esquema, etc.
  • Asocia, relaciona datos, ideas, hechos, etc.
  • Formula y responde preguntas de tipo literales, inferenciales y críticas
  • Es bueno poder comentar lo leído a modo de ver que estás entendiendo del texto y además como una forma de unión con tus padres o hijos y tener temas de conversación. Por ejemplo, la hora de almuerzo u once son buenas instancias para compartir lo leído, haciendo participe a nuestros hijos de nuestros temas de interés al leer o también para que ellos vean que su lectura también son temas de conversación con los padres.

La instancia de leer también puede contribuir en el desarrollo de la inteligencia emocional, a través de preguntas sobre los sentimientos y emociones de los personajes y como actuaron. Por ejemplo:

  • ¿Cómo crees que se sintió esa persona y por qué?
  • ¿Su cara demuestra felicidad?
  • ¿Qué hubieras hecho tú en su lugar?
  • ¿Qué otro final hubiera sido positivo para los personajes?

En otros tiempos, leer era una actividad muy preciada y divertida, ahora que estamos en casa podemos volver a practicarla y disfrutar en familia.